HISTORIA DE LA COMUNIDAD:
Cada comunidad tiene ciertas peculiaridades, costumbres, jergas de lenguaje social, creencias, historias inéditas, procedencias, tipo de trabajo que realizan, apellidos, rasgos físicos entre otros distintivos, por lo que la aldea Paley no se descartas a estos cuestionamientos.
PROCEDENCIA:
Según lo que han contado los señores de avanzada edad de esta aldea no existen datos fe asientes de la procedencia de los primeros pobladores de esta aldea, lo único se sabe es que predomina varios apellidos, tal como Tartón, Cún, Méndez, Lúc, Són, los más predominantes, también están los González, Tiño, Telón, Pusul, Ajanel, lo cierto es que cada cual viene de diferentes lugares, por ejemplo Los Méndez son originarios de Quiché, se asentaron hace aproximadamente unos sesenta años en estos lugares, juntamente con Los Luc, Los Tartón, Cun, Son, proceden de San Juan Comalapa, hace aproximadamente unos noventa años.
NOMBRE DE LA COMUNIDAD:
Desde hace muchos años, la gente que pasaba por estos lugares, nunca les parecía la productividad de la tierra, pensaban que no era muy fértil para la agricultura, el lugar era muy quebrada, predominaba la piedra, cualquier parte escarbaban siempre se encontraban con piedras, además de eso en estos lugares no crecían muchos árboles, lo que más daba la tierra en estos lugares era una planta llamada Chichicaste, que en idioma kaqchikel se llama L’ey, en estos tiempos en algunos lugares se observa estas plantas por montones, especialmente en la orilla de los riachuelos, en lugares en donde aun no se ha sembrado. por lo que seguían su camino en busca de lugares más fértiles para la agricultura. Después de varios años se asentaron las familias anteriormente descritas, maravillándose del tipo de suelo que encontraron, húmedo, arenoso y sobre todo fértil, propiedad especial para la siembra del café, llamándose más la atención por varios nacimientos de agua que encontraron en las riveras de las montañas de Paley.
De este preámbulo nace el nombre de la comunidad, según las personas de avanzada edad la aldea Paley viene de dos corrientes etimológicas o creencias, la primera es la concentración de varios lugares aledaños, específicamente en estos lugares existió la llamada alcaldía auxiliar , Aj taq kil, o aj ch’amiy, que entre todos los vecinos erigieron una ley, de manera que todos los habitantes se respetara unos con los otros, por lo que si alguien quebrantaban la ley, lo juzgaban ante la ley, en términos localistas lo llamaban ya b’e Paley. (te vas ante la Ley). La otra corriente es lo siguiente: Anteriormente en estos lugares existía mucho el chichicaste, que en kaqchikel lo llaman L’ey, muchos vecinos para diferenciarlo de otros lugares lo llamaban Pal’ey, es decir lugar de los chichicastes. Antiguamente en estos lugares existió un lugar de descanso para las personas que viajaban hacia la ciudad capital procedentes de la región de Quiché, con el tiempo construyeron una champa con bejutos, paja y madera para protegerlos del frío, llegaban al a tardecer, muy temprana hora tomaban otra vez sus caminos rumbo hacia Armita, así lo llamaban la ciudad capital, entonces poco a poco estos lugares se ha ido conociendo como Pal’ey, en el lugar de los chichicastes.
Algo de Leyenda:
Antiguamente, por estos lugares, era el camino preferido de un ser humano mítico que existió hace aproximadamente unos doscientos años, el ser era mitad hombre y mitad bestia, tenía las piernas de un toro y portaba cuernos, caminaba como un hombre normal, su comida preferida era eran los niños, los arremataba en los brazos de la madre los mataba quebrándoles la columna vertebral, por eso en el idioma kaqchikel lo llamaron Q’ajoy ij, españolizado sería Quebrador de espaldas o de columnas, pero en sí lo llamaban en español El Tronchador. (quebrador o partidor)
Según don Arcadio Asijtuj, (QEPD) la historia comienza de esta manera.
En todo el área de San José Poaquil, San Juan Comalapa, Santa Apolonia, San Martín Jilotepeque, parte de las riveras del río Motagua, pasando por las áreas del departamento de Quiché actualmente, todo este territorio pertenecía a un Español de apellido Centeno, en esos años trajo a dos familias ladinas asentándose en las riveras del río Motagua, en estos lugares hoy se conoce como Joyabaj, específicamente el lugar llamado Portugués, con el tiempo estas familias fueron multiplicándose dispersándose en lugares muy alejadas de una familia con la otra, después de cierto tiempo en una de estas familias nació un hombre, muy malo, más bien un asesino, lamentablemente en aquellos tiempos no existía la ley para juzgar a las personas, se reunieron todas las personas hasta que decidieron expulsar a este hombre, todos se pusieron de acuerdo en no darle su alimentación ni hospedaje, él vagó por mucho tiempo en las montañas, se alimentaba de animales salvajes, se dormía en las cuevas, hasta que tuvo una vida salvaje, después de un tiempo regresó en las cercanías de la casa, por su necesidad sexual violaba a las mujeres y niñas, hasta que sucedió un tiempo violaba a los animales, su preferencia por las vacas cada día aumentaba, en cierta ocasión quedó preñada una de las vacas propiedad de sus padres, la sorpresa le llegó a esta familia cuando una de las vacas le nació su cría mitad, hombre y mitad bestia, lo alimentaron como debía ser, hasta que cumplió su primer año. Todo este tiempo la familia lo mantuvo en total secreto, llegó un tiempo en que debían conocer las familias cercanas de este secreto, optaron por sacrificar al hermoso animal, luego de un estiro y encoje comprendieron que el ser debían darle vida, adiestrarlo para que tuviera una vida de animal, pero con el pesar de los días, la bestia fue cambiándose paulatinamente.
Cuando toda la comunidad estaba preocupada por el animal, debía comprender si dicho nacimiento era por cuestiones divinas o por algún cruce sexual entre un animal y un ser humano.
La conclusión llegó cuando se dieron cuenta que el hombre salvaje, no aparecía en ningún lugar, había pasado varios días en que no desaparecían los animales, las gallinas, los terneros, ya no había mujeres violadas, decidieron ir a buscar entre los barrancos, encontrándolo ahorcado…Desde entonces comprendieron lo sucedido con el ser extraño tenía mucho que ver con la muerte del hombre salvaje.
Al cabo de un tiempo, se dieron cuenta que los problemas no terminaba allí, cada día se empeoraba más, las violaciones se había cesado, pero lo lamentable es que encontraban cadáveres de personas mutiladas, todos tenía las mismas características, la columna vertebral partido en dos…El dueño del ser extraño apenas había empezado las mil desgracias en su propia familia…
Empezaron en busca entonces del tronchador, la noticia se extendió por todas partes, vinieron personas de varias partes a ofrecer apoyo, nunca se había visto una hermandad entre ladinos e indígenas, bajaban y subían montañas en busca del ser extraño, pero nunca que lo encontraban, ya agotados decidieron dejar en manos de Dios ya que jamás encontraron en ninguna parte, mucho se habló de la desaparición del ser, unos decían que se lo había tragado una montaña llamada Chubi tavia, otros decía que el caudaloso río Motagua, Nimay’a se lo había llevado entre sus aguas, e incluso se comentaba que se había alojado entre las montañas llamadas Ru Palej Q’ij y Ru Paley I’k, pero realmente la certeza nadie la tenía.
Pasaron más de veinticuatro meses, cuando volvieron más los sucesos, esta vez ancianos y niños mutilados por la espalda, el terror reinaba a un más en todos los hogares, nadie podía salir más de su casa, todo mundo temía por su vida, hasta que decidieron estudiar las características de todos los ataques, normalmente sucedía en horas de la tarde.
Después de un tiempo, tenían toda la información, pero que harían para enfrentarse ante semejante bestia, se había, incluso, entrenado para perseguir a sus presas, había conseguido un caballo elegante para transportarse a lugares lejanos, había que ser ingenioso para poder dar con el animal extraño.
Entre tantos planes que se habían trazado, nadie parece ideal para atrapar al monstruoso animal, algo debía faltar, ¿dónde tenía su refugio? ¿Entre las ramas de un frondoso árbol? ¿Bajo las piedras grandes del Nimay’a? ¿Quizá entre los grandes barrancos? O de repente en un agujero hecho por él mismo.
Siguieron pues su huellas hacia una montaña llamada Rab’ajal Q’aq’, siguieron río abajo hasta encontrar un lugar donde solía bañarse llamado Muqukill, efectivamente encontraron pertenencias del ser extraño, como jabón de monte llamado Ch’upeq, una piel de coyote para secarse, partes de animales muertes, conejos, gato de monte, armadillos…además de las huellas del caballo y las de él, tenían cierta semejanza, siguieron sus huellas pues hacia el norte, siempre en la dirección del Nimay’a. Cansados llegar en la cima de una montaña llamado Chuwitavia, permanecieron ahí hasta al amanecer, pero las huellas había seguido montaña abajo, siguieron pues hacia el río Xk’aqet ya, un río cristalino que da hacia las aguas del río grande, Motagua o Nimay’a, ya el cansancio se había apoderado de todos, descansaron cerca de una casa abandonada llamado kut’a Xan, precisamente en estos lugares vivían los familiares del ser extraño.
Al amanecer, después de una larga noche, lleno de temores, ruidos extraños que salía de las montañas, gritos de animales extraños, sobre todo el aullido de los coyotes de las praderas.
Nunca perdieron las huellas de los dos animales, llevaban ya tres días de vagar por las grandes montañas, no había esperanzas de encontrarlo, jamás pensaron que cerca del enemigo se habían quedado a dormir, hasta que uno de los parroquianos había divisado algo extraño unos cien metros hacia adelante, entre dos peñas gigantes, que salía del río hacia arriba. Tomaron precaución todos, se alistaron unos con otros, el machete filoso en la mano derecha y la izquierda un palo de dos metros, entre la cintura unos mecates gruesos… abrieron camino entre los matorrales sigilosamente, unos se apostaron directamente en el río, otros bajo las matas de nances que cubría de amarillento el suelo, porque precisamente en esos tiempos estaba finalizando septiembre, por último el montón de valientes partieron directamente hacia el refugio del Tronchador, había descubierto el agujero que por más tres años había empezado a construir, fue tanta la sorpresa que se llevaron cuando llegaron a la puerta del gran refugio monumental, que decidieron regresar con los demás para explicar el hallazgo. Llenos de valentía, regresaron donde la cueva, se había refugiado hacia las profundidades de la tierra. Nadie se animó a escalar dicho agujero, porque después de ingresar tres metros hacia adentro, la visibilidad era casi nula, el refugio seguí hacia arriba, precisamente daba hacia arriba de la montaña llamada Chuwitabia. Esperaron por otros tres días más, pero jamás se había asoma en la orilla, hasta que decidieron prenderle fuego a la caverna, buscaron broza, madera, chiriviscos, piedras explosivas para que el fuego devora todo incluso al ser extraño. Otros tres días aguantaron, con la esperanza que habían dado con el Tronchador… Hubo un poco de fiestas con las familias aledañas, porque se supone con el humo que habían causado por la quema del refugio, se había ahogado y quedarse en las profundidades para siempre… Han pasado más de ocho día después de la quema, hasta que un pastor de ganado divisó un humo espeluznante en la cima de la montaña justo enfrente de las montañas Rupalej Q’ij y ru Palej ik, aterrorizados los aledaños, se juntaron nuevamente para ir a ver que había pasado en esa montaña, tomaron pues camino arriba, caminaron cerca de dos horas hasta que llegaron donde salía aquel humo que se miraba a mas de cuatro kilómetros, se llevaron la más grande sorpresa de sus vidas, la boca del túnel daba precisamente en esa montaña, el humo que había causa montaña abajo había recorrido más de un kilómetro dentro del túnel hasta dar hacia arriba, precisamente por esa boca del agujero había salido victoriosamente Q’ajoy Ij, su bestia lo había dejado en las cercanías de esta salida, se ha marchado cabalgando en el caballo más hermoso del territorio…
No solo se habían topado con una bestia malvada si no que sobre todo inteligente.
Después de estudiar la actitud de la bestia, durante más de un año le tendieron una trampa…
Al Tronchador le encanta las señoritas de quince años, el plan para cazarlo estaba ya tendido y bien estudiado…
En el llano de la montaña, Chuwitabia, es el lugar perfecto, tres señoritas por las riveras de la montaña, se quedarían para esperarlo, al asomarse entre las milpas que da hacia la montaña, ellas gritan de terror, en busca de auxilio, escuchando los gritos de auxilio parte velozmente sobre el lomo del caballo hacia las tres señoritas, un grupo de valientes cruzan un mecate precisamente en el pecho del tronchador hasta que cae herido en el suelo, luego con palos y machetes destrozarían al animal. Pues cuenta la leyenda, que el plan había salido a la perfección, buscaron dos grandes árboles, uno en frente del otro…con un espacio de cinco metros, el mecate grande debía pasarse por arriba, para no lastimar al caballo, así lo hicieron ellos, el mecate grande pasó hacia arriba, escondido entre las hojas de los grandes árboles, al pasar velozmente bajo este lazo, estirarían hasta ver caer… El plan ha salido perfectamente, las tres señoritas corrieron velozmente en busca de auxilio, él cabalgó rápidamente en su bestia relinchando camino hacia la trampa, los valientes tendieron el mecate, el calló de espaldas en el suelo, se partió el cráneo, adiós mundo, adiós maldad entre los habitantes de la región, con eso habían logrado todo, cuentan nuestros antepasados, aquel día fue una gran fiesta para toda la comunidad, hubo, destace de reses, chicha, cuxa o pecado pecador (mak xajan) que así lo llaman al guaro de esas tierras. Estaba terminando octubre, después de un año de lucha…
La historia no termina aquí, no incluimos la desgracia que cae sobre la familia del Tronchador, mucho menos que habría pasado con el dueño del gran terrateniente Centeno, que al final de cuentas jamás puso un pie en estos lugares, dejando abandonado estas tierras, hasta que los indígenas y ladinos poblaron todo estos territorios, desde entonces ha reinado la paz entre los habitantes de esta comunidad. Continuará…
ALGO DE LA HISTORIA DE LA ESCUELA:
Hace aproximadamente ochenta años, cuando esta comunidad no tenía tantos habitantes, se organizó para que en aquellos tiempos funcionara algo para educar a los niños, pero lamentablemente no se registró la primera escuela en esta comunidad, si no que funcionó a más de un kilómetro, por la aglomeración de la gente en dicha comunidad, hasta más o menos en la década de los cuarenta cuando empezaron a gestionar el establecimiento, fecha exacta no se registra, pero según datos y recordación de los señores Gerónimo Són Cun, de setenta y cuatro años, Celestino Cun Oxí de 82 años, Luis Tartón Oxí de 81 años, José Angel Cún de 60 años, recuerdan haberles contado la creación de la escuela en esas épocas, específicamente en la década de los cuarenta, al principio el establecimiento lo construyeron como una galera con techo de paja, luego fabricaron adobes para las paredes, luego en la década de los sesenta se construyó una escuela ya de lámina, pero lo mismo las paredes de adobe, hasta que en la década de los ochenta cuando se construyó la que hasta actualmente se usan para albergar a los cinco grados del nivel preprimaria.
Solo me imagino como es Paley, ya que no logro visualizar aunque sea una fotografia...
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